(Saverio Wrangler)
Las profecías de los profesionales
siempre se cumplen,
decía un experto en la materia.
Así como hay expertos en el espíritu
los hay también en la materia.
No hay contradicción entre ambos,
me dijo un ex profesional:
Nosotros somos la prueba acabada,
la evidencia irrefutable:
La experiencia humana expresa
la comunión entre uno y otra
en toda su potencia.
Puede haber tensiones sin resolver,
lo aceptamos como recurso natural
para la evolución, pero no significa
contradicción.
Somos cuerpos y almas que se están
perfeccionando, en continua adaptación.
Todavía no alcanzamos la armonía
deseada entre las distintas fuerzas que
impulsan la evolución permanente:
Atravesamos conflictos de menor y mayor
intensidad que producen cambios, algunos
menos deseables que otros, eso es parte
del desarrollo y la diversidad.
Aún no pudimos acceder a la convivencia
sana y pacífica que quisiéramos. La violencia
pareciera fuera de control, es algo a superar.
Sabemos que es costoso, ya que desde una
visión profesional y desapasionada, nadie
ignora que ella es constitutiva de todo
evento evolutivo.
Si bien supimos producir más energía de la
que necesitamos, la producción no puede
detenerse y el excedente encuentra su forma
de canalizarse en esas emisiones de violencia
qu todavía no controlamos.
Es algo que habrá que superar, es sólo
una cuestión de tiempo:
Somos una especie superior, en lo material y en
lo espiritual.
No hay nada que no podamos superar con trabajo
eficiente y a conciencia.
La profesionalización en todas las áreas de la
actividad humana dará sus frutos, tarde o
temprano.
Somos cuerpos, materia altamente organizada.
Creemos en el espíritu de cuerpo y en el futuro
de las corporaciones.
