Frases hechas
-¿Qué piensa de las frases hechas?
-No se puede hacer nada.
-¿Aprueba?
-Están hechas.
-Es un hecho. ¿Cree en los hechos?
-No se puede hacer nada.
-¿Aprueba?
-Todo lo que aprobamos se nos puede
volver en contra,
y suele hacerlo.
-Es un hecho, como las palabras.
-Las palabras son hechos dudosos. Sin
palabras no tendríamos dudas.
-A las palabras se las lleva el viento.
-Una frase hecha...
-Sí, siempre que puedo recurro a
ellas.
-¿Cree en las frases hechas?
-Claro, son parte de la cultura, están
al alcance de todos y casi siempre
contienen alguna enseñanza; nos
educan.., y la educación es la mejor
inversión.
-¿Ud. cree?
-Sí, además sirven para no correr
riesgos; están hechas, probadas y
aprobadas.
-¿Está seguro?
-Sí; no hay nada más seguro que las
frases hechas: circulan porque funcionan,
son reutilizables, y quien las
emplea siempre sale bien parado.
-Un recurso renovable...
-Que además nos exime de la tarea de
armar nuestras propias frases y nos libra
del peligro de no hallar los términos
correctos y emitir juicios dudosos ó frases
desacertadas.
-También ahorra el esfuerzo de pensar,
una pérdida de tiempo.
-Seguro, el tiempo es oro... y hay que
reducir el costo social. ¿Para qué perder
tiempo pensando lo que otros ya
pensaron, y con un resultado aceptable: Las
frases hechas son producto de la
aceptación, todo lo que se repite se repite
porque se acepta; repetir es
aceptar.
-Acepto pero no comparto.
-Si acepta, está en condiciones de
repetir, y repetir es compartir: Al pronunciarlas
se activa una señal, un código que
nos refleja y reproduce como partes de algo
superior, las claves de un sentido
que nos permite reconocernos como semejantes.
-No creo en esas semejanzas. Si
fuéramos todos semejantes no habría conflictos, ni
desigualdades cada vez más
pronunciadas, no habría estados beligerantes, no habría
guerras, no habría violencia...
-La violencia es la partera de la
historia...
-Sí, no se puede hacer nada.
-Sí, se puede repetir: la historia es
tragedia que se repite luego como comedia. Y la
guerra, la violencia, pueden
entenderse como una continuación de la política por
otros medios.
-Seguro, podemos seguir repitiendo los
mismos desatinos tanto como queramos...
-Un destino seguro...
-No creo en los destinos seguros. La
voluntad de repetición no asegura ninguna
evolución, sino todo lo contrario.
-Sí, el hombre es algo que merece ser
superado...
-No estoy seguro de ese merecimiento,
pero en ningún caso la vía
de superación ha de ser la
repetición.
-No, hay que separar la paja del trigo;
se debe repetir sólo aquello que está probado
que funciona.
-Alguna frases...
-Algunas frases, algunos movimientos,
algunos hechos y secuencias, algunas respuestas,
algunos signos...
-Signos de descomposición: los mejores
signos para repetir. Todas las ideas, todas las
teorías y todos los discursos entran
en descomposición más tarde ó más temprano.
-Sí, por eso un discurso basado en
frases hechas es superior: Mantienen su vigencia y,
además, como son de uso público,
nadie las cuestiona -están aceptadas de antemano- y
siempre son bien recibidas.
Si Ud. está en una reunión, ya sea
familiar, partidaria, de amigos, una reunión de
trabajo ó una reunión de consorcio,
de egresados ó cualquier otra, no importa el ámbito,
y siente que tiene que decir algo
pero no está seguro, ó no se siente capaz de decir algo
interesante -ó no cree estar a la
altura de las circunstancias ó teme no poder complacer a
todo el mundo ó teme ser
malinterpretado ó teme arrepentirse de lo que va a decir, ó teme,
sin más, ó tiene dudas... No
vacile: suelte alguna frase hecha -en lo posible ingeniosa- y
saldrá airoso de la situación.
-Hay frases y frases.
-Sí, no todo lo que reluce es oro...
-No, quiero decir: se supone que uno
debe compartir el contenido de la frase que emite.
-No, para nada; eso no es necesario.
Lo importante es que los otros compartan y acepten..,
y siempre aceptan.
-Comparto, pero no acepto.
-No, la fórmula correcta es la
inversa: acepto pero no comparto.
-Pero yo no acepto: No quiero
complacer ni quiero ser aceptado a cualquier precio...
-Eso es inaceptable: Todos queremos
ser aceptados...
-¿A cualquier precio?
-Eso es secundario, los precios se
pueden negociar...
-¿Como las frases hechas?
-No, éstas no se tocan ni se negocian;
ya están hechas, acabadamente. Son algo establecido
que como tal no se cuestiona, ni
requiere siquiera nuestra aceptación: Ya fueron
socialmente aceptadas.
-Hay muchas cosas, socialmente
aceptadas, que uno puede considerar inaceptables. De
hecho hay cosas que no apruebo, no
acepto.
-¿Comparte pero no acepta?
-No, no acepto ni comparto.
-No, no puede no compartir: Si están
socialmente aceptadas, aún cuando no las acepte las
comparte. No se puede hacer nada.
Comparto, pero no acepto... Inobjetable la parábola de Remigio R. para arribar al cabo al punto de partida: "No se puede hacer nada". La maestría de este autor es tal que uno se pregunta: ¿Habrá lectores capaces de captar la profundidad de esos sentidos que la retórica de Remington pone en juego y en cuestión cuando dispara, por ejemplo: "No, la fórmula correcta es la inversa; acepto pero no comparto"...
ResponderEliminarUn grande, Remigio Remington, gracias por compartir...