(Por Vicente Narioh)
"El olvido es la función
natural del tiempo" D.F.
Hay muchas razones para escribir,
casi tantas como para no hacerlo.
Hay razones, motivos, causas,
se puede no tener razón, ó haberla
perdido en la acción:
La acción poética puede ser
riesgosa ó apacible, mover
a la pasión ó al tedio
Se puede escribir a favor ó en contra
del orden imperante, del sentido común,
del propio destino ó de las
condiciones
de la época, incluso del Orden
Natural
en sus distintas acepciones:
Se puede aceptar ó no...
Algunos escriben para la posteridad,
para dejar constancia que pasaron.
Otros, como pasatiempo: la escritura
es un pasatiempo sustentable; puede
sostenerse en el tiempo, sin requerir
mayor inversión, sólo tiempo …
El olvido, es la función natural del
tiempo
Algunos escriben para no ser olvidados,
otros para olvidar la realidad de una
vida
mayormente olvidable.
Ambas aspiraciones suelen resultar
inútiles.
'Vengo desde el olvido' -cantó un poeta popular,
conociendo, sin duda, que es éste el sentimiento
más popular-
Otra opción: Escribir para el olvido.
Escribamos cosas olvidables, dijo un
poeta
olvidado.
Seamos olvidables: soy el primero en
olvidarme,
olvido lo que escribo -no sé si esto
ya lo escribí-
Se escribe para olvidar,
el placer de la lectura -el goce del
texto-
es un placer efímero que se sostiene
en la posibilidad del olvido, la
libertad de
olvidar-
El poema es algo que merece ser
superado:
el olvido es un estado poético
superior
(El poema perfecto, es aquel donde la
velocidad
del olvido supera a la de su lectura)
Hay cosas que vale la pena olvidar,
las otras no valen la pena.
(No lo olvides)