Soberanía del deseo

 

 

(Carlos Inquilino)

 

 

Si tuviera que pedir un deseo…

-Que se vayan ellos.

¿Por qué?

-Porque es nuestro deseo.

¿Y el de ellos?

-No, si no no hubieran venido.

-Bueno, eso es cosa de ellos. Hay

que respetar el deseo del otro.

-No, son ellos o nosotros, dicen

ellos.

¿Y ante eso que podemos decir?

-Que no, que somos nosotros o

ellos.

¿No se podría negociar?

No, no podemos ser nosotros con ellos:

hay cosas que no se negocian.

-Pero ellos tal vez piensen lo mismo…

-No, nunca van a pensar lo mismo; si

fuera así, serían como nosotros.

-Bueno, pero tal vez, acordando aglunos

puntos básicos, se podría…

-No, no hay lugar a una salida negociada.

La única salida es que se vayan ellos.

¿Y si no entran en razón?

-Seremos ellos o nosotros.

¿Y si nos fuéramos nosotros?

-¿Adónde vamos a ir? ¿Quién nos va

a querer?  ¿Quién nos va a querer 

como nosotros?