viernes, 31 de mayo de 2024

Éxitos anónimos

 

(Olegario Saldívar)

 

El cadáver respiraba con dificultad,

pero pudo articular unas palabras:


Es difícil volver al anonimato

después de haber conocido el éxito.


No he producido nada que merezca

recordarse, pero la Historia está

sembrada de cadáveres anónimos.


Siempre fuimos y seremos mayoría,

estamos persuadidos. Aunque el éxito

nunca dejó de ser ajeno a las mayorías.


La tierra es otra cosa.


jueves, 30 de mayo de 2024

Conquistas de la humanidad

 

(Aparicio Custom) 


El emprendedurismo es un humanismo.

Si algo nos define como especie,

es el espíritu de conquista.


Por él conquistamos la conciencia, la

Naturaleza, la vida espiritual y todos

los continentes en que se divide el mundo


(En rigor, nunca se hubiera dividido sin

nosotros: esa es otra conquista memorable)


La suma de conquistas acumuladas nos

eleva sobre el Orden Natural, cuya esencia

es material:


Nos sabemos parte de él, pero a la vez, lo

transformamos; creemos que todo lo que

existe puede ser superado por la acción

humana.


Somos los únicos que producimos arte,

aún a sabiendas de que no sirve para nada.



II

Procedemos de la división del trabajo,

a la que debemos la inversión: una operación

compleja para capitalizar el tiempo y sostener

el desarrollo indefinido.


Nos define la conquista, que nos trajo hasta

aquí y no tiene por qué detenerse.


La división funciona, y es la que preferimos

entre todas las funciones conocidas: Sabemos

diferenciar lo útil de lo inútil, separamos la

basura en libertad y aprovechamos la utilidad

residual de los valores digitales.


Nuestra conciencia superior se amplía con cada

nueva conquista. Sabemos que no somos sólo

materia y aspiramos a más.


Nuestro espíritu de conquista está intacto,

y dispuesto a emprender nuevas aventuras.



El emprendedurismo es un humanismo,

como el oportunismo y las distintas opciones

del onanismo inteligente, virtual o presencial.


El mundo no sería el que es sin nuestra presencia.


Provenimos de la división del trabajo, y otras

divisiones subalternas, pero descendemos de

nuestros primeros conquistadores naturales,

nuestros ancestros: aquellos pioneros, padres

emprendedores cargados de futuro.


Nunca nada estuvo mal, no te quejes:

No seas animal.

miércoles, 29 de mayo de 2024

El problema de los peces voladores

 

(Tomás Lovano)

 

El pez volador no tenía nada

que temer ni que perder,

nadando o volando, su dominio

era absoluto.


Sus movimientos armoniosos,

bajo o sobre el nivel del mar eran

la envidia de propios y extraños.


A sus predadores, de abajo o de arriba

los burlaba sin mucho esfuerzo, con

la maestría propia de un artista.


¿Lo era?

¿Era consciente de su superioridad biológica?

¿Gozaba de su arte sabiéndose perfecto?

¿Sentía que estaba para más?


-Sí y no: Autopercibirse diferente suele

ser un problema, tanto que esta condición

no deseada le hacía dudar de su sentido

de pertenencia:


No soy de aquí ni soy de allá.


Puedo sumergirme en lo más profundo

y elevarme por encima de todos con la misma

eficacia. ¿Un don divino? ¿Una gracia de Dios?


Pero ¿quién soy, entonces?


Entre los peces, un extraño. Y entre las aves

nunca era aceptado como un par.

Sólo podía despertar envidia, lo que lejos de

producirle placer, lo sumía en un profundo

desasosiego:


No soy de aquí, ni soy de allá. Pero no puedo

ir en contra de mi naturaleza, cualquiera sea.


Con este pensamiento impropio de su especie

se elevó, ganando altura por encima de las altas

nubes y aún más allá del espacio aéreo surcado

por todos los volátiles.


Sin prisa y sin pausa, siguió ascendiendo hasta

perder de vista este mundo hostil y cumplir

su objetivo: Conocer a Dios.


Él lo miró sorprendido, como si no lo reconociera

como una de sus criaturas, o no esperara su visita.


Señor de los Cielos, vengo a devolverle

su anzuelo. Y sin esperar la divina respuesta

emprendió el retorno a la tierra, al aire, al agua

a la intemperie.


La opción correcta

 

(Nicasio Uranio)

 

Los curas de la opción por los pobres

reconocieron su derrota, en una muestra

de hidalguía:


Se impuso la otra opción, ellos contaban

con más recursos. Hay que saber perder

y aceptarlo con dignidad.


Ganar y perder son accidentes:


Lo importante es mantener viva la llama

de la fe, que acaso sea lo único que nos

une.


La unidad no se negocia.


martes, 28 de mayo de 2024

El poema pasatista

 

(Luis Espéculo)

 

Escribo otro poema pasatista.

Es más fácil acumular estos objetos

en el tiempo que tiempo sin objeto.


Hacer poemas es una forma de hacer

tiempo, mis poemas no reniegan de

su condición efímera, cumplen en tiempo

y forma su función y aceptan ser un

pasatiempo sin contradicción ontológica

ni metafísica.


Otros aspiran al poema memorable, se

empeñan en trascender el tiempo

y disputar un lugar en el futuro.


¿Habrá tal cosa? ¿Acaso hay un futuro

para el poema? ¿Tendrían prioridad los

buenos, o sólo los memorables?


¿Tienen memoria los poemas?


¿Hay algo vivo en ellos, más allá de

su presente más o menos dudoso?


Hay poemas paisajistas, futuristas, simbolistas

y ornamentales. También confesionales,

coloquiales, evanescentes y anacrónicos.


Yo sospecho que todo poema es un anacronismo

y que el futuro podrá prescindir perfectamente

de todos ellos, como de nosotros.


Hay que saber estar de paso por el poema,

Siempre vuelvo al poema pasatista,

me complace comprobar que es lo menos

complaciente que puede hacer un poema.


Poluciones mágicas

 

(Malcolm Mercader Ergástulas)

 

En el pasado está la clave

de todo lo que no te va a pasar.


¿Te da paja detenerte acá

y concentrarte en el sonido

de tus voces muertas?


Tendrías que trabajarlo

en un sentido ecualizador.

Lo que no se sueña también

se descompone:


Todo tiene un costo, aunque no

todo se puede recargar.


Las palabras tienen un costado

oscuro, sólo que cuando se mueven

no se ve.


Hay bastantes cosas que no se ven,

pero pasan y no significa que no

funcionen:


Las ratas son muchas más de las

que vemos, pero nunca dejaron

de acompañarnos. Tenemos una

historia en común.


¿Alguna vez viste la sonrisa

de una rata?


lunes, 27 de mayo de 2024

Las feromonas de la fe

 

(Serafín Cuesta)

 

Desempolvé mi fe

en el polvo y superé

otra crisis terminal.


Hay que volver al polvo primordial,

la fe es el combustible de los dioses,

su condición es la pasión:


Sin ella, la vida se disipa en presunciones

vanas y trámites absurdos.


Hay que volver al polvo primordial:

En un principio no había nada,

sólo polvo cósmico.

El resto era futuro.


La muerte no existía y todo estaba

por consumarse. Pero la fe fructificó

y el mundo se pobló de plantas, dioses,

animales y bacterias a imagen semejanza.


Se necesitaba una criatura superior

que dispusiera de toda esa riqueza

y organizara el mundo:


El hombre inventó el trabajo,

y vio que era bueno.


Pero no se conformó, y vio que podía

ser mejor dividiéndolo.


A partir de entonces, su conciencia no descansó

en ningún cociente ni descansó en la producción

de nuevas divisiones: Gobernar es dividir,

pensó y vislumbró que todo lo visible

era también divisible:


Todo se divide, hasta el polvo, la molécula

y el átomo: La división es la función divina

por antonomasia, verificó con fe.


Ahora sabemos diferenciar el polvo natural

del artificial. Hay polvo enriquecido y polvo

residual, polvos tributarios y fiduciarios.


Está el polvo bruto y el polvo elaborado,

así como sus subproductos: polvo propio

y ajeno, polvo reciclable y polvo irreductible

más el polvo enamorado que no tiene

vencimiento.


domingo, 26 de mayo de 2024

Caudales

 

(Onésimo Evans)

 

No pude acaudillarme

en forma provechosa.


Acuclillarse

es más facil que acaudalarse

salvando las distancias.


Un caudal de imágenes dudosas

acude a mi mente abovedada

por efectos anteriores:


restos de pasado, materia residual

que se atesora sin otro destino que

ocupar ese lugar provisional.


Los caudales fluyen entre los acaudalados

que prosperan ante las masas crecientes de

desposeídos que esperan un caudillo que

los salve del mal y su caudal casual o

causal.


Salvando las distancias, nunca supe

acaudalarme, ni poseerme ni empoderarme,

aunque tal vez no quise.


Pero cuánto no quise…


¿Es todo una cuestión cuantitativa?


sábado, 25 de mayo de 2024

Aprovecha tu propia atracción

 

(Gualterio Whiteman)

 

Ámate a ti mismo:


Hay que darse al amor;

atraes lo que te das.


No te midas al darte

ni al recibirte: Aún

tienes mucho para darte.


Nunca digas, no estamos

ligando nada: El no, es

prefijo de todo lo nocivo.


Quien dice no, atrae todo

tipo de signos negativos.


No te niegues al amor.

El amor bien entendido

empieza en primera persona:


Ámate a ti mismo,

como prójimo a su ritmo

acérrimo.


Atraes lo que te das,

atráete más, no temas,

no te arrepientas de este amor.


¿Acaso no te encuentras atractive?

¿O no crees merecerte?

¿O temes no ser correspondide

en la misma medida?


Olvida las medidas, son todas

arbitrarias, a diferencia del amor

que es pura inversión.


Ámate y comparte tu atracción:

Puede que seas tu mejor inversión.


Atráete, y encuentra en ese abismo

la mejor versión de ti mismo.


jueves, 23 de mayo de 2024

Cómo disfrutar una naturaleza muerta

 

(Nicasio Uranio)

 

Gozamos observando el orden natural.

Nuestra naturaleza superior

nos permite gozar tanto de la Naturaleza

Muerta, como de la viva.


Incluso hay quienes gozan del estado

de transición entre ambas condiciones

naturales:


El Arte contempla todas las formas

de goce que ofrece la materia en sus

diversas expresiones. Lo que es posible

gracias al goce de la cultura, que incluye

toda la actividad humana y algunas

tradiciones muy antiguas.


En el Arte de la Tauromaquia, el público

festeja, se excita e incrementa su goce,

a medida que el cuerpo de la víctima, ya

debilitado por las torturas recibidas, deja

de ofrecer resistencia y se entrega a su

destino final de Naturaleza Muerta:


El mismo que todos compartimos.


martes, 21 de mayo de 2024

Poema acéfalo

 

(Aparicio Custom)

 

El crecimiento exponencial

de la masa encefálica de una cucaracha

doméstica, inducido artificialmente en

el laboratorio mediante técnicas avanzadas

de manipulación genética, un invalorable

aporte de la biología molecular, ha arrojado

resultados sorprendentes:


La cucaracha, no sólo mostró ductilidad

para articular pensamientos bastante elaborados,

sino que incorporó sin dificultad la lógica

del lenguaje humano, valga la redundancia,

expresando su entera disposición a colaborar

en el evento.


Además, logró superar las distintas pruebas

evaluatorias a las que fue sometida para establecer

su coeficiente intelectual, dando muestras de una

inteligencia superior a lo previsto.


Tanto es así, que después de haberlas superado

a todas, pedía que le trajeran más, y lo hacía en

un tono sarcástico, no exento de burla.


Perplejos, los científicos no sabían si celebrar

el éxito obtenido.


Ella, por su parte, parecía seguir autopercibiéndose

cucaracha, pero su cuerpo se veía alterado y había

perdido parte de su estética original, con el volumen

desmesurado de su cerebro, que seguía creciendo,

aunque todavía caminaba.


Los hombres de ciencia, no pudieron dejar

de reconocer que esa inteligencia era equivalente

a la nuestra y acaso superior. Pero descartaron

que fuera capaz de desarrollar principios éticos.


lunes, 20 de mayo de 2024

El poema errático

 

(Aparicio Custom)

 

Las malas decisiones pueden

hacer naufragar tu poema

de mar, de amor, tu oda

o tu elegía. Vos elegís.


Ser selectivo con las decisiones

que afectan al poema, es siempre

redituable.


Una sola decisión incorrecta

es capaz de hacer colapsar el cuerpo

del poema, cuyo armado tanto

te costara (Bueno, quizás no tanto)


La calidad en la gestión de tus recursos

poéticos, genuinos o no tanto, podría

verse alterada por esa decisión inadecuada

y precipitar en el error no forzado.


Con un control selectivo, lograrás

que se impongan las decisiones correctas,

el único camino para evitar un poema

errático, que sólo puede vacilar


(entre las múltiples funciones asignadas

a los poemas)


domingo, 19 de mayo de 2024

Poemas de baja definición

 

(Armando Labarrera)

 

El poema de baja definición

podría obtener un rendimiento

superior:


No son tiempos de definiciones,

nadie las quiere ni las necesita.

Y sería improbable que alguien

las buscara en un poema, objeto

tan indefinido como indefinible:


Todos los que lo intentaron

fracasaron.


Pero no significa que sea un poema

de baja intensidad; antes bien, la falta

de definición de las tensiones sin

resolver, pueden conferirle al poema

una intensidad inusitada:


¿Alcanzás a percibir como aumentó

la intensidad de este poema de baja

definición?


Es verdad que no es definitiva

y puede declinar, pero ninguna

verdad lo es hasta que se demuestre

lo contrario.


viernes, 17 de mayo de 2024

La fraudulencia del aire

 

(Aparicio Custom)

 

Se respira un aire de insolvencia

entre los cuerpos colegiados.


Todos los cuerpos semovientes

somos parte del comercio del aire

y de la volatilidad de los mercados,

colega. Me dijo un insolvente

de última generación.


La malversación del oxígeno

nunca fue buen negocio. Pero hay

oportunidades disponibles para

emprender, contaminar y ser

contaminado:



Todos somos parte de algún mercado,

la voluntad no cuenta: sólo hay que

aceptar.


La fraudulencia está en el aire, que

sigue siendo ajena a nuestras cláusulas

legítimas y al progreso verificado

de educadores y educandos.


Los nuevos recursos retóricos acompañan

el movimiento evolutivo y lo mantienen

sustentable. Un aporte valioso para

generar oportunidades y atraer inversiones:


Disponemos de la obsolescencia programada,

la insolvencia fraudulenta y la invisibilización

asistida, junto a la ingeniería financiera, la

arquitectura legal y otras disciplinas que aún

están en desarrollo pero pronto enriquecerán

nuestro lenguaje.


jueves, 16 de mayo de 2024

La aventura de la repetición

 

(Remigio Remington)

 

Hoy barrí dos veces

la misma superficie,

pienso mientras no barro.


No fueron consecutivas

pero fueron dos. La verdad,

no tenía pensado barrer,

como tampoco repetir:


Pienso en frío, hace bastante

frío como para pensar en otra

cosa.


Ya barrí, y repetí. No me aburrí

al barrer ni barrí de puro aburrido:

Lo hice sin pensar, como tantas

cosas que se hacen, ahora que pienso.


No es lo mismo pensar y hacer,

hay que buscar un equilibrio entre

ambas acciones.


Tal vez nunca pensé en barrer,

pero barrí dos veces ¿fueron dos?


Lo que se repite se piensa dos veces,

dijo el filósofo alemán que pensaba

mucho más que yo.


No sé si barría como yo, o sólo barría

cuando pensaba, aunque no pensara

barrer.


Tampoco sé si es bueno pensar tanto,

después escribimos cosas que nadie

entiende; no sé si se entiende…


No sé, tal vez pronto vuelva a barrer,

a ver qué pasa. Al menos uno siente

que cumple una función útil, aunque

no necesaria, y propicia cierto orden:


Alguien lo tenía que hacer, me tocó

a mí el trabajo sucio y cumplí.

El ambiente lo agradece: Se nota

que barriste, parece decir.


A barrer se aprende barriendo, no es

difícil, y si uno se pone un poco más

obsesivo barre cada vez mejor, hasta

incluso cuando no hace falta:


Es como escribir, una práctica que

puede repetirse casi sin límite.


Vuelvo a lo pensado en el pasado:

Hoy barrí dos veces (una, algo más

minuciosa: no recuerdo el orden

secuencial) y todavía es temprano.


Dos veces, pienso y vuelvo a pensar

en el filósofo alemán y esdrújulo:


Al pensarlo otra vez, el pensamiento

vuelve a multiplicarse por dos.

La pregunta es la siguiente:


¿Cuántas veces barrí?

 

(Los monjes budistas de la constelación

de las últimas noches, dedican las primeras

cuatro horas del día al barrido exhaustivo :


Un hábito que repiten desde hace siglos

o milenios.  Luego desayunan, después oran

y enseguida anochece)



miércoles, 15 de mayo de 2024

Los mercados naturales

 

(Tomás Mercante)

 

Los mercados evanescen

entre el bien y el mal

siempre algo crece:


Crecer es bueno,

siempre supimos crecer

(sabíamos que era bueno)


el saber también crece,

hoy sabemos más que ayer

pero seguimos aprendiendo:


Siempre hay algo que aprender.

No estamos solos, siempre algo

crece alrededor, acá y en las

antípodas.


Algo crece, algo se cuece, algo

perece para bien o para mal.


Entre el bien y el mal

los mercados evanescen:

el crecimiento sostenido es natural.


Siempre supimos y creímos,

venimos a crecer y a declinar,

mientras crecen y decrecen

nuestros activos y pasivos.


martes, 14 de mayo de 2024

Vuelos cancelados

 

(Rolando Doorland)

 

No son muchos los mamíferos

que vuelan.


Yo conozco al murciélago

y poco más. ¿Qué pasó?


¿Algo falló? ¿No fue lo que

se esperaba, un ensayo que no

prosperó?


Se sabe que hubo otros, pero algo

hizo que fracasara ese proyecto 

evolutivo, y la Naturaleza

descartara el vuelo del mamífero:


No era útil a futuro, merecía ser

discontinuado.


Pero entonces, el murciélago

¿Por qué no se extinguió?


Tal vez sirva como testimonio vivo

de aquel ensayo trunco, el error que

subsiste para que no se repita:


Nadie los ama, ni se identifica

con ese obscuro mamífero que vuela,

transmite enfermedades y además es

ciego y duerme colgado.


Como si fuera poco, sale de noche,

tiene vida nocturna y otros hábitos

no menos sospechosos:


habita campanarios y sitios tenebrosos

y es pariente del vampiro. Es mal

presagio y ni siquiera posee la gracia

de las aves al volar.


¿Quién podría verse reflejado

en semejante mamífero?


Sólo Batman, nuestro Superhéroe

que a pesar de sus años no descansa

en su lucha contra el Mal.


lunes, 13 de mayo de 2024

Los nuevos atavismos

 

(Emeterio Askman)

 

Los nuevos atavismos  están marcando

tendencia entre nosotros, y dan cuenta

de la dinámica evolutiva.


Nos es difícil percibirlo, por lo acotado

de la vida humana, si bien su esperanza

se sigue prolongando, no sabemos hasta

cuando.


Los atavismos conocidos, como el ojo de

águila, el pecho de pollo, el tercer molar

o la oreja de mico con su punta angular

y pintoresca, pronto serán cosa del

pasado.


Todos los atavismos son resabios del

pasado, pero quiérase o no, la evolución

diferenciada nos va alejando cada vez

más de los animales que supimos ser:

 

Nada nos ata al pasado.


El hombre se renueva como individuo

y como especie, a medida que nuestra historia

crece: Hasta ahora, nunca paró de crecer.


Sabemos que el Superhombre fracasó (tal

vez estuvo demasiado solo), y el hombre

nuevo colapsó antes de dar sus primeros

pasos.


Ya nadie cree en el Sujeto Histórico, algo

superado. Pero seguimos siendo protagonistas

de esta historia, al menos en el plano biológico,

y contamos con la ingeniería genética para

apurar los tiempos de la evolución y superar

los propios límites de la Naturaleza.


El vello púbico en las mujeres y gestantes,

ya está pasando a ser un atavismo, como

tantas cosas que se vuelven inútiles o entran

en contradicción con las prácticas sociales.


También la inteligencia natural que nos distingue

entre los primates superiores, perderá utilidad

ante el avance inexorable de la Inteligencia

Artificial, que ofrece un rendimiento ventajoso.


¿Somos el rebaño elegido por la Selección

Natural, o la manada seleccionada?


Aún no se puede verificar, pero la evolución

es un camino sin retorno.


Habrá nuevos atavismos disponibles.


El peligro de despejar

 

(Aparicio Custom)

 

El birlador, como el escapista,

el evasor autónomo

o el defraudador, son personas

altamente capacitadas que confían

en su arte.


El jugador hace una finta, un

movimiento engañoso, repite

el amague desairando al marcador.


Encara el dribling, zigzaguea y

vuelve a pasar, dejando atrás la

marca pegajosa.


¿Qué es lo más pegajoso conocido?


Hay pegamentos para atraer moscas,

mosquitos, cucarachas, ratas y otras

criaturas que profesan algún apego

hacia nosotros.


La vida, el juego, repiten los obstáculos:

Hay que encarar.


Unos intentan y fracasan

y repiten el ensayo y el error.

Otros quedan fuera de juego

y se resignan:


Resignarse en una forma de repetir.


El birlador vuelve a pasar y se despega,

como quien sale airoso de un poema

pegajoso.


Siempre hay otro que intenta despejar:

El arte le debe mucho a la repetición,

como todos los juegos conocidos.


Aunque ella también tiene sus riesgos,

no se puede repetir siempre lo mismo

¿o sí?


El jugador vuelve a pasar,

él confía en su oficio o arte

y se aventura:


Lo vuelve a hacer como si fuera

natural burlarse y repetir:


La burla sostenida en la técnica

es útil para el arte de jugar, pero

no es una meta en sí misma: Por más

que se repita sigue siendo un medio,

nunca un fin.


Otros tienen por meta despejar el peligro

toda vez que se presente, bajo cualquiera

de sus formas repetibles.


No es ocioso repetir, aunque sea inútil:

Él se burla, y vuelve a pasar.


domingo, 12 de mayo de 2024

Cómo volver al ritmo original

 

(Asensio Escalante)

 

Si llevamos un ritmo

hasta sus últimas consecuencias

se transforma en su opuesto.


¿Cómo identificar aquí

la verdadera oposición?


No es sencillo: Hay ritmos simples

y compuestos, el desarrollo rítmico

no conoce límites, aunque todos

ocurren en el tiempo.


El ritmo sólo se sostiene en el tiempo,

como todo organismo vivo.


El tiempo es ajeno a todos los límites

que emiten los cuerpos vivos. Para él,

no hay materia muerta;


no hace diferencias: todos nuestros ritmos,

con sus tiempos débiles y fuertes, son parte

de una misma continuidad sin opuestos.



II

Sólo nosotros observamos pautas

y frecuentamos distintos ritmos:


Entramos y salimos en forma azarosa

con algún resultado; una experiencia

acumulable.


Ni el movimiento, ni el tiempo pueden

acumularse, pero la práctica del movimiento

vivo en forma metódica y a un ritmo regular

es útil para mantenerse en forma.


Somos forma, órganos pautados y figuras

de un movimiento errático, mientras el

tiempo hace su trabajo.


Hay la presunción de un ritmo universal

al que todos estaríamos conectados

como miembros:


Es difícil desconectarse del universo

de las presunciones, nuestro conocimiento

es acotado: los límites son constitutivos

de los cuerpos y los ritmos.


¿Estamos hechos de límites?

¿Hasta dónde se extiende la capacidad

de incorporar más límites y ritmos?


¿Somos pautas rítmicas que vacilan

en un orden deliberado y preexistente

a la célula rítmica?


Si llevamos un ritmo hasta las últimas

consecuencias, se transforma en su opuesto.


Obtenida la oposición, habrá que negociar:

ambas partes deberán ceder algo.


Pero ¿Cómo saber cuál era el original?

¿Cómo identificar la verdadera oposición?


No es sencillo, hay que ser mesurado

ante las consecuencias de lo inevitable:

Sin medida no hay ritmo, ni orden.



sábado, 11 de mayo de 2024

Caminar derecho

 

(Serafín Cuesta)

 

En mi barrio, se ha perdido

la costumbre de caminar derecho.


Hacerlo resulta peligroso,

se puede aventurar.


Yo, que siempre mantuve una línea

de conducta como peatón, y persisto

en andar derecho por la vida

 

y procuro mantener mi andarivel,

ya casi no me aventuro a caminar

las calles de mi barrio.


No tengo la cintura, ni la ductilidad

de un joven para esquivar bultos

o cuerpos que se cruzan sin motivo.


Y sospecho que me ven como un

peligro, por mi conducta diferente.


Prefiero evitar el contacto estrecho

y mantener una distancia saludable,

más allá de tendencias y pandemias.


Tengo una línea de conducta:

Siempre caminé derecho, con o sin

motivo, y no voy a dejar de hacerlo

sólo porque todos hayan perdido el

rumbo.


El que no sabe por dónde va

es mejor que no salga.



viernes, 10 de mayo de 2024

La transparencia ideológica

 

(Aparicio Custom)

 

Somos mayoría

los que deseamos la ideología.


Disculpemé, preguntó un curioso

al portador de la pancarta ¿Cuál

es la ideología que está promoviendo?


-No importa, compañero. El mensaje

es más profundo que eso, se trata de

buscar la unidad: todos tributamos a

alguna, no nos engañemos. Fuera de

la ideología, no hay nada.


-¿Está seguro?


-Vea, la seguridad es un concepto

ideológico. Lo único seguro es la

ideología, en cualquiera de sus versiones.

No sé cuál es la suya.


-No sé, tengo mis dudas. La verdad, sufrí

muchas decepciones; prometen una cosa

y después…


-No se engañe, compañero. Es la ventaja

de las ideologías; nunca son lo que parecen,

como la vida misma, tienen contradicciones.

Por eso sobreviven, se adaptan y nos mantienen

en estado competitivo.


-Eso es puramente ideológico, no hace falta

saber latín. No dé más vueltas, amigo, y

confiese su verdadera ideología.


-No hay ideología verdadera, eso es un perfecto

oxímoron. Soy del partido de todos; la verdad

es otra cosa, y nunca fue accesible a las mayorías.

No se engañe, compañero.


-Si las ideologías son un engaño, lo suyo es aún

peor promoviéndolo, y pretendiendo quitarles su

esencia, que es la confrontación: Toda creencia

ideológica necesita negar a las otras, eso las

sostiene y les da sentido. No me engaño, y no

soy su compañero; no comparto esa ideología.


-Todavía no, a eso hay que darle tiempo. Y no

podría compartirla porque no la expresé aún

en toda su magnitud. Es cierto que las ideologías

confrontan, pero el término compañero tiende a

borrar las diferencias: Si todos nos reconocemos

compañeros, todo lo demás pasa a un segundo

plano y se crea la ilusión de unidad. Hay que sumar...


-Eso ya fracasó, compañero...


jueves, 9 de mayo de 2024

Técnicas avanzadas

 

(Aparicio Custom)

 

El tecnicismo es un humanismo,

y está plagado de valores y promesas.


Hay valores que prometen a futuro.

El futuro es puro diseño tecnológico

y puesta en valor.


Con la tecnología se come, se educa

y se combaten todas las plagas.


(Hasta ahí estábamos todos de acuerdo)


No venga a tasarme el campo

con ojos de forastero, cantaba

un hombre de a caballo, hace años.


Hombre del campo nacional y popular,

hoy devenido forastero en estos pagos

endeudados.


La tecnología es la evolución de la técnica:

En el campo filosófico, ya Heidegger lo

había advertido hace años:



El conocimiento sin sujeto

nos puede llevar a cualquier parte.


Hoy todo es parte del pasado,

no hay lugar para nostálgicos:


Disponemos de suficientes dispositivos,

y habrá más.

Hay plataformas en desarrollo

y habrá más.


Hay nuevas técnicas en plena evolución,

sólo es cuestión de capacitarse y

mantenerse actualizado: Habrá más,

para quien desee agregarse.


Hay técnicas para mejorar el rendimiento

en lo que se te ocurra.


¿No se te ocurre nada?


Podés hacer un poema con eso:

Hay técnicas para producir poemas

sin necesidad de saber mucho del tema,

ni poseer ningún talento, ni esperar

la inspiración.


Es mucho más seguro, y funciona.

Ni siquiera hace falta saber qué es

un poema ¿Vos creés que alguien

lo sabe?


Con la tecnología disponible, tenés

acceso a todos los recursos poéticos

conocidos hasta acá, para diseñar y

producir libremente tu poema

y ofrecer un producto competitivo.


Hay predictores, correctores y todas

las herramientas que necesites para

evitar el error no forzado.

Habrá más.


El futuro ya llegó, y es puro diseño

inteligente, obra de tecnologías que

nos superan en capacidad.


En este momento, hay quienes están

diseñando la Historia que vendrá.


El sujeto histórico es cosa del pasado,

hay que mantenerse actualizado:

El que se distrae se lo pierde.


No seas un perdedor: Hay técnicas

disponibles para evitarlo, asesorate.


¿Habrá más?


La medida correcta

 

(Periferio Gómara)

 

Me dí a darme sin medida

todo lo que necesitaba

para no necesitar.


No necesité medir mucho:

Fue una buena medida,

era justo lo que necesitaba.


Las medidas justas suelen ser

buenas, aunque las buenas medidas

no necesariamente sean justas.


Es difícil ser justo en todo sentido,

tanto con los otros como con uno

mismo: Hay muchos sentidos.


El sentido se produce en la conciencia,

y ahí no hay un patrón de justicia:

Cada uno tiene el suyo propio, obtenido

de distintas formas y sujeto a cambios

en sentido histórico, y según las condiciones

del entorno, es decir, otras conciencias.


Cada comunidad, grupo, familia, sociedad

tiene sus propios criterios de justicia.

El individuo los adopta, reproduce, y

en algún caso altera o reformula, para

adaptarlos a la propia necesidad

de su conciencia en desarrollo.


En alguna medida, toda conciencia

es producto del intercambio, como

los cuerpos orgánicos con o sin

conciencia.


Sólo somos conscientes de una parte

del intercambio que cursamos,

de cuyo desarrollo dependen

todas las funciones, hasta las más

inútiles.


En alguna medida, podemos afirmar

que sólo el intercambio es útil:


Sin él, no tendría sentido la producción,

ni el trabajo y no tendría lugar la

producción de utilidades.


La conciencia se adapta a las condiciones

del intercambio, que son dinámicas:


Es lo que queda como activo,

o saldo metabólico de esa interacción

que fluye y nunca se completa.

 

Debemos ser mesurados.

Sólo podemos medir lo que existe:

Lo que no se puede medir, no existe.




miércoles, 8 de mayo de 2024

Huella y camino

 

(Serafín Cuesta)

 

Abrumado por la bruma,

ya lejos en el tiempo del fin

de toda zona urbanizada,


el viejo Buick seguía impertérrito,

avanzando a altas horas

como un fantasma seguro de sí mismo

entre la oscuridad de un paisaje

deshabitado.


Con éste no hay nada que temer,

estos autos viejos son de fierro.


Camino de ripio, con límites difusos.

Orienté el buscahuellas para mejorar

la visión. Siempre puede aparecer

una alimaña, o algo peor, nunca se sabe.


La noche puede ocultar sorpresas

indeseables. No se puede confiar mucho

en vidas nocturnas, ni en faunas cadavéricas:


Sabemos que no estamos solos

en la promiscuidad de la noche,

aunque parezca lo contrario.


La luz larga y el buscahuellas, me brindaban

suficiente seguridad. Me puse a hablar solo,

para no distraerme y dormirme: A falta

de interlocutor, no había otra opción.


Hablábamos de bueyes perdidos

sobre la monotonía de una recta

que parecía infinita, sin más señales

que unas huellas, quién sabe de quién

que revelaba el buscahuellas.


No consume poco el Buick, pero es un fierro,

aunque no sea primera mano y tenga casi

ochenta años.


La bruma impregnaba la noche.

Ya despejará, nunca es eterna la noche

desde que el mundo es mundo.


La vida nocturna no me inquieta,

ni los accidentes naturales del camino

que alumbra el buscahuellas.


Ai hay algo seguro en esta vida,

es el camino que puede verse

a través del parabrisas.


No tiene una visión panorámica,

el Buick es de otra época: como yo

y algo más viejo.


Pero es cómodo, sólido, seguro

y el buscahuellas está intacto.


martes, 7 de mayo de 2024

El origen de las palabras

 

(Ricardo Mansoler)

 

A ver, vos que armás cosas con palabras

¿Sabés cuál es la más necesaria y útil?


Me disparó clavando su pupila oscura

en la mía de tono más dudoso.


No, le respondí con seguridad para evitar

la imagen vacilante del que duda, como

un enamorado.


Correcto. Sabía que no me decepcionarías.

Sin ese humilde monosílabo, aún estaríamos

anegados en el mismo pantano primordial,

sin conocer evolución alguna:

Sólo el hombre que dice que no, es libre.


(A partir de entonces, ya no fue ajena a mis

demandas amorosas y entendí: En el amor,

no hay mucho que entender; siempre nace

de un equívoco)


lunes, 6 de mayo de 2024

Poema sin valor comercial

 

(Carlos Inquilino)

 

Aumentó el precio de la carne.

Aceptamos que es algo natural:

la carne es parte de nuestros

recursos naturales.


Procedemos del comercio

de la carne, un denominador común:

Sólo eso nos iguala, después

todos somos únicos.


Podemos reproducirnos, pero no

repetirnos:

Todas nuestras reproducciones

son parciales como réplicas.


A la sazón, somos unidades

intercambiables y nos une

la pertenencia a un lugar común,

un orden superior:


La Biomasa Madre.


Intercambiamos experiencias, objetos,

valores, tiempo y poco más.

Reconocemos un valor a cada objeto

y en cada sujeto.


Aunque mantenemos profundas diferencias

sobre el contenido de esa palabra -valor-

tal vez con más funciones que sentidos.


Sin embargo funciona, y nos permite

funcionar con normalidad como valor

de cambio.


Somos funcionales al intercambio,

activo o pasivo: Procedemos del

comercio y tributamos a un metabolismo

particular, que define nuestro comercio

con el mundo y sus sentidos.


(Hay comercios más y menos gozosos)


El resto es metáfora, material de intercambio

que circula en un sentido u otro, productos

residuales de quienes gozamos del comercio

de la palabra.


Todas nuestras propiedades están vinculadas

al comercio: Lo único propio y no negociable

que atesoramos como sujetos, está dado por

el intercambio.

Necesitamos incorporar, para poder emitir.

Sin intercambio no hay vida.


Somos este negocio, el resto va y viene:



 


Licencia Creative Commons
http/:Demolicionyobranueva.blogspot.com por José Luis Greco se encuentra bajo una Licencia Creative Commons Atribución-NoComercial-SinDerivadas 3.0 Unported.
Basada en una obra en Demolicionyobranueva.blogspot.com.
Permisos que vayan más allá de lo cubierto por esta licencia pueden encontrarse en Demolicionyobranueva.blogspot.com.