(Aparicio Custom)
Recién al final de su vida
supo que tenía pie plano
-un atavismo muy común, todavía
nos estamos adaptando a la posición
erecta; éramos cuadrúpedos hasta
hace poco-
Saberlo lo tranquilizó:
No hubiera podido llegar muy lejos
de cualquier modo, con estos pies;
bastante hice.
El conocimiento provee casi todas
las respuestas que necesitamos, y
mejora la vida hasta su último
segmento:
Todo tiene una explicación que lo
justifica. No existe un fracaso absoluto.
No hay que dar nunca nada
por perdido, hasta perder la vida.
Un pie más o menos plano
no altera nada en la calidad de vida
del palmípedo.
Todo es parte del plan Divino,
que es perfecto. Después pasamos
a otro plano y no se necesita ningún
pie: basta un calzado liviano.
No hay comentarios:
Publicar un comentario