(Aparicio Custom)
El terraplanismo se está globalizando,
otra muestra de que la globalización
descontrolada, produce un claro retroceso
en el ejercicio del pensamiento libre.
Cada día necesitamos pensar menos
(Hoy todavía no pensé, y es tarde. Tal
vez mañana ni siquiera piense en ésto)
El achatamiento se redondea hacia los
polos, y la globalización genera, entre
otras consecuencias, la polarización:
Son ellos o nosotros, no hay lugar para
el libre discernimiento ni el pensamiento
propio.
Todo se reduce a la fórmula binaria:
es blanco o negro, plano o esfera, amigos
o enemigos, positivo o negativo, dador o
o receptor, sano o enfermo, muerto o vivo,
poesía o prosa, capitalismo o…
No, no hay opción, según la globalización
no hay nada fuera de ahí, de aquí.
¿Aceptar o rechazar?
No, no siempre se presenta la opción:
La globalización tiene sus aristas
pero no es algo rechazable, ni para el
terraplanista acérrimo.
Cada vez necesitamos pensar menos
y aceptar más, una realidad que hay
que acatar.
No hay comentarios:
Publicar un comentario