jueves, 27 de febrero de 2025

Cría y domesticación del cuervo nativo

 

(Antístenes Oquendo)

 

Cómo incorporar un cuervo

al cuerpo del poema.


Precauciones:

Si el cuervo se encabrita y exacerba,

bien puede el ciervo achancharse

como víbora enroscada en su miembro

de raíz, o agusanarse solo como tábano

feliz en la masmédula de un húmero

genérico y orgánico como tú.


Quedan los élitros impúberes al borde

de la mesa:   Toda mesa humana

es ante todo una mesa de disección

que espera ser servida.


¿Qué es la vida? Le preguntamos al

cuervo antes de que calle para siempre

o empiece a repetir el verso aquel que

no queremos recordar.


No te confíes, los cuervos son mañosos

y amañados. No te encariñes mucho, ni

lo ames: Podría encorvarse como un gato

montés y engatusarte.


No te abatates ni te ensartes


¿Mirá si el cuervo se hexacorva como el

sable cuervo del Libertador y el chancho

se le insubordina y se exacerda porque no

cabe en el sayo suyo que no es éste, y 


no espera como un santo de la espadaña

su carnada azulaina, y sin soltar mastica

tu impaciencia?


No es ninguna ciencia incorporar

un cuervo a la casa del poema. 

 

Pero hay que tener paciencia y no sirve

de mucho: No es ave de cetrería, para

cazar no sirve y habla poco, tal vez su

única virtud.


No hay comentarios:

Publicar un comentario

Licencia Creative Commons
http/:Demolicionyobranueva.blogspot.com por José Luis Greco se encuentra bajo una Licencia Creative Commons Atribución-NoComercial-SinDerivadas 3.0 Unported.
Basada en una obra en Demolicionyobranueva.blogspot.com.
Permisos que vayan más allá de lo cubierto por esta licencia pueden encontrarse en Demolicionyobranueva.blogspot.com.