(Horacio Ruminal)
Ningunear es un verbo
de última generación:
Es natural a la dinámica evolutiva que
el lenguaje se transforme, crezca y se
enriquezca generando nuevos significantes
y produciendo los verbos que necesitamos
para reflejar las nuevas realidades, en
continua evolución.
Es un proceso dialéctico: Transformamos
la lengua, adoptando nuevos términos y
descartando otros (que perdieron utilidad
y valor), mientras que a su vez, la lengua
nos transforma.
Es cierto que podíamos soslayat, menospreciar,
desateneder, desvalorizar y despreciar…
Pero no era suficiente con esos verbos, aún
vigentes. El ninguneo es más profundo e
intenso; más rotundo y contundente:
El ninguneado desaparece directamente, no
ve reducido su valor ni pasa a un segundo plano:
No existe, no está ni vivo ni muerto; no se le
reconoce ninguna forma de existencia.
II
Hay, incluso, una instancia anterior al ninguneo,
menos taxativa y precisa y también disponible
como verbo, que viene ganando presencia en
el habla cotidiana: invisibilizar.
Es para valorar la evolución operada en el campo
semántico, ofreciendo nuevos recursos retóricos
que no sólo enriquecen nuestro vocabulario, sino
que ensancha el horizonte de las comunicaciones
interhumanas y nos permite gozar de mayores
posibilidades expresivas y oportunidades.
Poetas, políticos, psicoanalistas, publicistas
y todos aquellos que trabajan con la palabra,
debieran agradecer estos avances linguísticos
y ontológicos, que seguramente ya han sabido
incorporar a sus actividades profesionales.
El ninguneo genera oportunidades en todos
los ámbitos de la actividad humana vinculados
al mundo sensible.
III
Aquí, he recogido un poema anónimo
que rinde tributo a estas valiosas conquistas
de nuestra lengua:
No habrá ninguno igual,
no habrá ninguno.
No lo busques en tu lista de contactos
ni en ninguna base de datos:
Soy único, nunca nadie podrá
ningunearte como yo,
con este arte, impar y único.
No me busques, puedo estar
en cualquier parte o en ninguna:
Los caminos del ninguneo son
casi infinitos.
No habrá ninguno igual:
Soy único, único y auténtico
como ninguno.
No habrá ninguno igual,
no habré ninguno.
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