(Malcolm Mercader Ergástulas)
Huyó sin ser notado.
Notó que nadie lo notaba
y eso lo tranquilizó,
para seguir huyendo.
Era un hombre tranquilo,
sereno y pacífico como un
océano, o sea una persona de las
que siempre pasan desapercibidas:
Su presencia no incomoda, ni se
extraña al faltar, ni se advierte:
Es casi idéntica a su ausencia.
Por ejemplo: acá no está, doy fe.
Pero podría estar y nada cambiaría:
Sabe estar ausente sin ausentarse
y hacerse presente sin que nadie
lo note.
Invisibilizarse es un arte, son pocos
los que dominan esa técnica. En el
primer intento todo el mundo falla,
como en todas las artes.
Pero la constancia en el tiempo
da sus frutos; quien lo logra, es
como si conquistara el mundo:
Otro mundo, algo más extraño que
éste y al que cuesta adaptarse.
Casi todos terminan huyendo,
aunque casi nadie lo nota.
No hay comentarios:
Publicar un comentario