(Serafín Cuesta)
Renovamos aspiraciones, cargas
de artefactos, deseos, artefactos,
células y esfínteres.
Invertimos en cargas, recargas, objetos
y renovaciones, y sabemos invertir la
carga de la prueba.
La capacidad de inversión, es una prueba
fehaciente de la evolución alcanzada.
Renovamos nuestros vencimientos:
La renovación es una forma de inversión.
Necesitamos nuevas células para seguir
invirtiendo y desarrollando: Confiamos
en la reproducción inteligente de nuestro
capital biológico:
Somos lo más avanzado en biomasa
y venimos liderando el movimiento
evolutivo de la materia orgánica.
Nuestra capacidad de adaptación
es portentosa y a ella debemos casi todo
lo que somos y la posición que gozamos:
Supimos adaptarnos a cualquier cosa:
Es eso lo que nos hizo superiores: Nuestros
miembros se adaptaron a la nueva posición,
nuestra dentadura se adaptó y lo sigue
haciendo.
Todos nuestros órganos están en continua
adaptación: Tenemos aptitud y vocación
de cambio.
Las aspiraciones no declinan, y se adaptan
a las nuevas realidades que nosotros mismos
producimos:
Entrañas, dientes, jugos gástricos y esfínteres
de última generación nos muestran disponibles
para tragar todo tipo de sapos, culebras y otras
alimañas con resultados positivos y un éxito
metabólico sin competencia.
Somos metabolismo superior, con vocación
de crecer,
No hay comentarios:
Publicar un comentario